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Profesor de la UNAM diseña un topógrafo corneal con cámara de celular - 330ohms
En el Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología (ICAT) de la UNAM se elabora un topógrafo corneal cónico compacto que permitiría detectar problemas de ojo seco y/o de queratocono (patología de la córnea que altera su forma), tecnología que beneficiaría a la población de comunidades rurales alejadas. Su desarrollador, Manuel Campos García, integrante del Grupo de Metrología Óptica de esa entidad, explicó que el objetivo es contar con un instrumento que pruebe más área de la superficie corneal, y que además utilice la cámara de un teléfono inteligente.
El Dr. Manuel Campos García se especializa en metrología e instrumentación óptica, cuenta con varios artículos de investigación publicados y es citado en numerosos documentos de investigación. Vía: ICAT-UNAM.
¡En un abrir y cerrar de ojos!
Al participar en el coloquio del ICAT con el tema “¡Y en un abrir y cerrar de ojos, el topógrafo corneal cónico!”, dijo que además de ser tecnología cien por ciento mexicana, con este sistema se puede acceder al hardware de la cámara y programarlo para tener imágenes adecuadas, calibrándolo. Otro atributo es que la información obtenida se podría procesar en el mismo dispositivo, o enviar a la Nube; y su costo sería competitivo frente a los sistemas comerciales, abundó el experto y participante del Laboratorio Nacional de Óptica de la Visión de la Universidad.
La cornea como superficie convexa y reflejante
En la sesión virtual explicó que uno de sus principales objetivos es la detección de queratocono en edad temprana y, en consecuencia, que los especialistas brinden un tratamiento adecuado. La córnea, dijo Campos, aporta dos tercios del poder refractor del ojo, por lo que es sumamente importante para la visión. Su forma se mide considerándola como una superficie convexa y reflejante; con base en eso se desarrolla un modelo matemático que arroja parámetros geométricos como el radio de curvatura y la constante de conicidad.
En comparación con el método de Placido, el sistema propuesto usa puntos que, dependiendo de su desviación de la circunferencia, permite determinar el mapa de elevaciones y con esto las características de la córnea.
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Los parámetros de su topografía
La topografía corneal mide la elevación (forma de superficie), los radios de curvatura (sagital y meridional) y el poder refractor de esa capa externa del ojo. Cada uno tiene distintas aplicaciones, como el diseño de lentes de contacto o intraoculares adecuados a cada paciente. Para medir la forma de la córnea hay distintas técnicas; una de las más útiles es la basada en los llamados discos de Plácido, que son anillos concéntricos, oscuros y luminosos, del mismo espesor que, al colocarse frente a la superficie corneal, generan una imagen. En caso de haber deformación corneal, los anillos que se reflejan dejan de ser circulares.
Los mapas de elevación permiten analizar la forma de la cornea. En los casos donde la superficie sea más irregular quiere decir que hay aberraciones en la forma de la cornea. Vía: ICAT-UNAM
La integración del topógrafo corneal
Campos García señaló que existen instrumentos comerciales para medir la forma de la córnea que usan pantallas con tales anillos concéntricos, o un prisma de pantallas planas con leds, con buena precisión, por ejemplo de 0.1 dioptría y con errores en la elevación de entre dos y seis micras. Por eso, “nuestros desarrollos deben estar dentro de estos parámetros, al menos”.
La propuesta del proyecto es que la pantalla que utiliza el topógrafo corneal cónico compacto tenga forma de cono –en vez de cilindro, como se usa de forma convencional–, y en lugar de círculos concéntricos negros y blancos de forma alterna, puntos en forma de gotas en disposición semiradial.
Tales puntos, añadió, se pueden colocar en el número y posición que se desee para tener más información de la córnea; aquí “es evaluada en cada punto”. En contraste, los anillos la proporcionan en una sola dirección.
Dos niveles de integración de la tecnología propuesta. En el primer caso se busca una unidad comercial que pueda colocarse en un laboratorio oftamológico, en donde el paciente se coloque frente al instrumento. En el segundo caso, más portátil, los conos se colocan en una montura como si se tratara de un visor de realidad virtual. Vía: ICAT-UNAM
La integración de este proyecto ha dado resultados comparables con unidades comerciales, por lo que su fabricación e implementación se muestra viable. Por el momento el proyecto sigue en etapa embrionaria, pero da muestras de ser prometedor y una aportación valiosa a la comunidad.
Referencias:
Profesor de la UNAM diseña topógrafo corneal que funciona con la cámara del celular
DESARROLLA UNAM TOPÓGRAFO CON CÁMARA DE CELULAR PARA EVALUAR LA FORMA DE LA CORNEA